miércoles, 18 de diciembre de 2013

PARA SENTIRTE MÁS FELIZ, HAZ MÁS CONTACTO CON TUS VECINOS .

Por lo general, ni conocemos a los vecinos, o solo los "conocemos" de vista. Así ocurre a pesar de que estamos muy próximos y tenemos intereses en común, por ser parte del mismo vecindario.
A veces es por desinterés o porque hay vecinos que dan claras señales de no ser personas de buen trato.  Pero -por lo general- es porque pensamos que saludar y acercarnos puede ser interpretado como curiosidad o abuso de confianza.
Pero ese distanciamiento humano no ayuda ni a ellos ni a nosotros. Contactar con ellos no significa invadir su privacidad física o emocional. Debería significar tener la oportunidad de saber nuestros nombres, saludarnos, sonreírnos y, por qué no, darnos una mano cuando haga falta.
Todo eso aumenta el bienestar.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Lo mismo ocurre con los compañeros de trabajo o de estudio.

Martha Sialer Chaparro dijo...

Acercarse a las personas puede darnos bienestar. Hacerlo, con prudencia y con buen criterio. Ya el Espíritu Santo nos dirá cuando "juntos en fraternidad, pero no revueltos".