Las personas que lo olvidan viven saciándose de ropa, joyas, lujos, comida, placeres, dinero.
Y a ojos inexpertos pueden parecer hasta felices, sin serlo.
Una persona feliz es equilibrada en todo. Aquella persona arrastrada por lo material está gritando en silencio que está vacía.
Saberse espíritu encarnado, viviendo en el tiempo y en el espacio, da serenidad y da perspectiva de vida.
Saberse un ser poseedor de espíritu lleva a buscar algo más, algo superior, algo que trascienda las limitaciones de la vida y la tierra, algo que nos ayude a entender todo lo que en esta vida nos resulta incomprensible.
Buscar una práctica religiosa, mejor aún, buscar fe en Dios, nos genera una vida más feliz.
viernes, 31 de agosto de 2012
PARA SENTIRTE MÁS FELIZ RECUERDA QUE TIENES ESPÍRITU .
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario