Cierto que hay momentos, temas y personas que nos provocan a pelear. Pero estaremos mucho más contentos si sabemos evitarlo. Mira que digo "evitar", no digo "aguantar".
Y podemos aprender a evitar peleas. Nos basta con sentir el mal sabor que nos dejan las peleas para querer aprender a no ser pleitistas.
Y te lo sugiero especialmente con tus familiares y los amigos. Con extraños veremos en cada caso que es lo que conviene más.
Con la familia y los amigos es mejor usar la conversación, las razones, el buen humor.
No se trata de hacer como que "no pasa nada", no. Si hay algo que aclarar hay que hacerlo, pero aclarar dialogando y con buen tono, usar la reflexión no impositiva sino con calma y recurrir al buen humor (no al sarcasmo!!) cuando aparece la tensión.
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